AVE MARIA (Schubert)
Esta pieza, conocida como “el Ave María de Schubert” que se ha hecho sumamente popular y repetida en ceremonias de boda, procede de uno de los muchos lied (canciones) que compuso Franz Schubert, en concreto el titulado “Liederzyklus vom Fräulein vom See” es decir, la adaptación musical del poema épico de Walter Scott “La Dama del Lago”.
En 1825, Schubert compuso una selección de siete canciones sobre este poema, que fueron publicadas en 1826 como su op. 52. En “La Dama del Lago” (en concreto el Loch Katrine en las Tierras Altas de Escocia) el personaje de Ellen Douglas, la dama, se ha ido con su padre para esconderse en la cercana Cueva del Duende para evitar la venganza del rey a su anfitrión, el jefe del Clan Alpin, quien los había cobijado desde que el rey los exilió. Ella canta una oración dirigida a la Virgen María, invocando su ayuda. La canción hace la número cinco: Ellens Gesang III (Himno a la Virgen) D 839 Ave Maria! Jungfrau mild! (¡Ave Maria! ¡dulce doncella!")
La letra original de la canción es como sigue:
¡Ave María! Virgen piadosa,
¡Escucha la oración de una doncella!
Tú puedes oír aunque sea de lo salvaje,
Tú puedes salvar en medio de la desesperación.
Seguros podemos dormir bajo tu cuidado,
Aunque exiliados, marginados e injuriados
¡Virgen! Escucha la oración de una doncella;
¡Madre, escucha a una hija suplicante!
¡Ave María!
Las palabras de apertura y el estribillo de la canción de Ellen -Ave María - condujo con el tiempo a la idea de adaptar la melodía de Schubert como un arreglo para el texto completo de la oración tradicional católica del Ave María, en latín, pero Schubert no compuso esta pieza originalmente como un arreglo para el Ave María, tal como ha quedado explicado.
Franz Schubert (Viena, 31 de enero de 1797 – 19 de noviembre de 1828) fue un compositor austríaco, considerado introductor del Romanticismo musical pero, a la vez, también continuador de la sonata clásica, siguiendo el modelo de Ludwig van Beethoven. Fue un gran compositor de lieder, breves composiciones para voz y piano, antecesor de la canción moderna. Escribió más de seiscientos lieder, así como de música para piano, de cámara y orquestal. En Viena Schubert llevó una vida bohemia rodeado de intelectuales, amante de las tabernas y de los ambientes populares, alejado de los salones y de la etiqueta nobiliaria. De este entorno procede el famoso término de schubertiadas: reuniones de artistas de todos los ámbitos que formaban un círculo brillante y animado dedicado a la música, a la lectura (y a la bebida). No fue reconocido en vida y solo fue después de su muerte cuando su arte comenzó a conquistar admiradores.