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QUÉ NOS DICE CADA OBRA DEL REPERTORIO
Alborada
La alborada es una pieza instrumental de origen popular interpretada, casa por casa, por grupos de gaiteros en la madrugada de los días de fiesta de los pueblos. Las alboradas son piezas instrumentales, sin acompañamiento vocal, que utilizan la gaita como instrumento principal. Tradicionalmente los gaiteros los tocan, al comienzo de las jornadas de las fiestas patronales, mientras van de casa en casa anunciando el inicio de las celebraciones del día. Es un género musical similar a otras piezas diseñadas para el desfile, como las marchas y las ruadas. En el último tercio del siglo XIX, en el momento del Resurgimiento de la cultura gallega, diversos compositores de música clásica se inspiraron en estas músicas populares para sus obras. Así se han popularizado muchas alboradas, como la Alborada de Verín, la Alborada de Poio, la Alborada de Inzenga o la Alborada Gallega de Pascual Vega.
Muñeira
La muñeira (en gallego, muiñeira: "molinera") es una danza popular de origen gallego que se baila en Galicia, en las comunidades autónomas españolas de Asturias y en territorios de Castilla y León limítrofes con Galicia. Según Dionisio Preciado, en otras regiones de España se la llama «gallegada». Se canta y baila acompañada de la gaita, el tamboril o tambor, la pandereta (pandeireta), el pandero (pandeiro), bombo, charrasco y a veces las conchas (cunchas ou vieiras). No existen referencias documentales anteriores al siglo XVI. En la actualidad es, sobre todo, una danza instrumental que al igual que la sardana mantiene un ritmo compaseable en 6/8. El nombre muiñeira evoca las jornadas de trabajo en los molinos -en gallego muíños- y el ocio asociado a la espera de la molienda.
Da rosa rosiña
Esta obra de Julio Domínguez es una panxoliña o canto popular de Galicia que se entona sobre todo en época navideña y suelen hacer alusión al carácter religioso de estas fiestas. Es por ello que muchos las consideran villancicos, aunque siendo ambas canciones de navidad, las panxoliñas son de ámbito popular, mientras que los villancicos son de ámbito principalmente religioso y empleados en las liturgias eclesiásticas. Las panxoliñas ya existían en el siglo XV, y hay referencias de cómo los vecinos se organizaban para cantar “al niño Jesús” y “al portal de Belén”. La mayoría de ellas se transmitieron de generación en generación oralmente, por lo que no hay apenas constancia escrita de estas canciones antes del siglo XX. Al igual que los villancicos y las cantigas de Nadal, estas piezas son entonadas tanto por hombres como por mujeres y pueden llevar o no acompañamiento musical. Pero si algo caracteriza a la mayoría de panxoliñas y las hace diferentes a las demás canciones de Navidad es que son piezas sencillas y llenas de ternura, normalmente dedicadas al niño Jesús, que se parecen a los cantos de cuna. Tanto es así que en Galicia algunas nanas (cantos de arrolar ou falar baixiño) se entremezclan con los cantos de ofrenda al niño Jesús característicos de las panxoliñas. El término panxoliña procede de las dos primeras palabras del himno eucarístico Pange lingua escrito por santo Tomás de Aquino para la festividad de Corpus Christi en el siglo XIII. La consolidación del término fue más reciente, en el año 1956, cuando el periodista y etnógrafo gallego Cipriano Torre Enciso escribió y editó el libro Panxoliñas: retabro galego de Nadal como regalo para sus amistades. Aunque la obra de 63 páginas e ilustrada por José A. Cuní, fue creada con la intención de servir como regalo y no para alcanzar grandes ventas, si es considerada como la primera (o una de las primeras) obra culta dedicada a la Navidad en Galicia por un literato en lengua gallega que bebe de la tradición popular y de los registros que la interpretan.
Media vita
Es una obra compuesta a partir de un canto llano del compositor irlandés Michael McGlinn popularizada por el grupo vocal de música tradicional irlandesa que dirige, Anuna, y con la que suele abrir sus conciertos. A partir de esta obra Julio Domínguez hizo esta adaptación añadiendo un acompañamiento de piano y haciendo algunos cambios para facilitar su interpretación a una plantilla vocal de coro mixto. La antífona gregoriana en la que está basada, además de sus usos litúrgicos, se cantaba como una petición de ayuda en tiempos de penuria, y que alguna vez llegó a usarse incluso como una especie de maldición intimidatoria. Fue muy popular entre peregrinos y templarios y el texto sirvió de inspiración a muchas piezas literarias y musicales a lo largo de la historia. Su uso en este taller representa la fuente común de la que beben la música irlandesa y gallega, y que según la musicología moderna es principalmente el canto llano y no la música de los antiguos celtas de la que poco o nada sabemos.
María Soliña
Es un arreglo de Julio Domínguez a la melodía original de Antonio Valverde (1973) sobre el poema de Celso Emilio Ferreiro (1912-1979) inspirado en María Soliña, personaje cuya historia alimentó la leyenda de la meiga de Cangas y que fue pasando de generación en generación entre sus habitantes. Según los archivos de la época María Soliño fue una pescadora y terrateniente juzgada por brujería en 1621, a los setenta años. Quedó viuda cuando unos piratas barberiscos saquearon el pueblo y asesinaron a su marido y su hermano. Después de esto cundió la hambruna en el pueblo y María poseía bienes codiciados por la nobleza. En la acusación ante el Santo Oficio de Compostela se detallaba como prueba que acudía sola cada noche a la playa en la que su marido y su hermano habían muerto donde suplicaba para que el mar devolviese los cuerpos. María confesó bajo tortura y a diferencia de lo que cuenta la leyenda, la pena de morir quemada en la hoguera fue conmutada, aunque recibió el castigo del escarnio público y hasta se le llegó a acusar en el pueblo de ser culpable del ataque de los piratas. Otras mujeres juzgadas a la par sí fueron quemadas vivas y según unas coplas populares de la época estas meigas de Cangas no eran sino nietas de María Soliño.
Mo Guile Mear
Es una versión coral de una canción irlandesa que combina un antiguo aire tradicional con letras seleccionadas de poemas de Seán “Clárach” Mac Domhnaill (1691-1754). La forma original de la canción uniendo ambos elementos fue creada en 1970 por Dónal O’ Liatháin (1934-2008). El poema original en el que se basa principalmente la obra representa un lamento en voz de la diosa gaélica Éire, a su vez una personificación de Irlanda, después de la batalla de Culloden que había hecho añicos los sueños de independencia escoceses y que impregnó también de desánimo a los independistas irlandeses. El lamento es por la partida del Carlos Estuardo, el “joven pretendiente” a la corona de los jacobitas a quien idealizaban irlandeses y escoceses y a quien llamaban cariñosamente Bonnie Prince Charlie.
Danny Boy
Es una de las canciones más populares y representativas de la cultura irlandesa. Su origen es incierto aunque la melodía corresponde a una antigua tonada conocida como “Londonderry Air” a la que posteriormente se le añadió un texto escrito por el abogado, músico y escritor inglés Frederic Edward Weatherley (1848-1929) quien fue el más prolífico letrista de baladas de su tiempo. Publicó la canción con letra en 1913 y muy pronto su popularidad aumentó notablemente. Actualmente es considerado casi un himno para los irlandeses.
Cuatro Cantos Pulares de Galicia
Julio Domínguez armonizó cuatro piezas de ambiente tradicional gallego, que agrupó bajo el nombre: 4 Cantos Populares de Galicia, para que fueran cantadas por el coro "Camerata al Libitum" y fueron concebidas como una obra en conjunto, si bien se puede cantar cada una de ellas de modo independiente. Esta obra fue cantada como tal por primera vez en el año 1996, en el Certamen Internacional de coros de Tolosa.La primera de las cuatro se titula Compañeira, que fue compuesta por Xosé Luis Rivas, miembro del grupo Fuxan Os Ventos desde su fundación hasta 1982, para posteriormente formar junto con Baldomero Iglesias el grupo A Quenlla, que sigue en activo. La armonización que realizó Julio Domínguez, sin letra (se canta con boca cerrada), la incluyó como la primera parte de los "Cuatro cantos populares de Galicia". Sigue la canción Ruada de Chamosa, que procede de la versión que hizo "Fuxan os Ventos". La Pandeiretada es la tercera de las cuatro, y finalmente, en último lugar se incluye Foliada de Olas.
Geantraí
Geantraí podría traducirse literalmente como “canción alegre”, y el nombre está tomado de uno de los tres tipos de música descritos por los antiguos gaélicos: geantraí, goltraí (lamento) y suantraí (nana). Se trata de una especie de slip jig, uno de los géneros de danza irlandesa más comunes, escrita en 9/8, que suele bailarse con zapatos blandos, siendo un baile muy elegante y controlado, a menudo llamado “el ballet de la danza irlandesa”. Hubo un tiempo en que el slip jig solo podían bailarlo los hombres, luego durante décadas solo las mujeres, y hoy en día, por suerte, puede ser bailado por todo el mundo. No obstante, esta es una slip jig un tanto peculiar, con el uso habitual de Michael McGlinn de las armonías y síncopas típicas del jazz, conjuntamente con el gusto por conseguir sonoridades arcaicas con el empleo de intervalos de quintas justas y melodías basadas en los modos gregorianos.