CHIPIRONES EN SU TINTA
Esta no es precisamente receta para nuestras queridas y añoradas meriendas dada la untuosidad y color de su salsa que pide mojar pan, mucho pan. Pero es un plato tan delicioso que no he podido resistir el compartirlo con todos vosotros para que no dejéis de preparlo un domingo cualquiera a la hora de comer y podamos comentar lo rico que está en la hora de la merienda. ¡Que aproveche!
Tres bolsas de chipirones rellenos congelados marca La Sirena
Tres cebollas
Tres tomates
Un pimiento verde
Cuatro dientes de ajos
Aceite de oliva virgen extra
Tres o cuatro bolsitas de tinta de calamar
Sal, agua y perejil
Tres rebanadas de pan mojadas en vino blanco
Se descongelan los chipirones.
Se pone en una sartén o cazuela el aceite de oliva, se cortan en trozos pequeños las tres cebollas, los dientes de ajo picados, el pimiento verde cortado muy pequeño, los tres tomates pelados y cortados en trozos muy pequeños también.
Se rehoga todo eso a fuego muy lento hasta que la cebolla esté pochada. Por lo menos quince minutos.
Se añaden las rebanadas de pan mojadas en vino blanco.
Se añaden las tintas disueltas en un poco de agua, y se mezcla todo bien.
Después se tritura todo el conjunto con una minipimer o robot de cocina. Se reserva.
Los chipirones se cierran con un palillo para que no se les vaya el relleno. Se prepara una sartén con aceite de oliva y se doran un poquito.
En una cazuela se echa toda la salsa que tenemos preparada, también se colocan los chipirones y se pone todo a hervir a fuego suave durante unos 20 o 25 minutos.
Se presentan en fuente con una ramita de perejil por encima y pueden acompañarse de arroz blanco y una copa de un buen clarete Cristóbal de Morales.